El Hay Festival es uno de los eventos culturales más importante que se celebran en
Colombia.
Este año, una de
las conversaciones más
concurrida fue la de la blogera cubana Yoani Sanchez, estandarte de la disidencia,
quien ha venido ventilando la realidad de la vida cotidiana de una Cuba
asfixiada por el atraso económico y tecnológico, y encerrada por más de cincuenta años bajo la tutela omnipotente de la
familia Castro.
Yoani, más allá de
la sospecha razonable de que su pensamiento ha sido difundido con la
complacencia, o tal vez con la colaboración, de los Estados
Unidos, es portadora de un mensaje que muestra las dificultades que enfrentan
sus compatriotas, y sus anhelos por la superación de un régimen que
se sostiene mediante respiración artificial. Una economía totalmente desestructurada
que, paradójicamente, subsiste por las remesas que envían los cubanos en el exilio, los
denominados "gusanos de la revolución".
Dicen que la inventiva habita cerca de la dificultad, y
esta filóloga de
profesión y periodista por convicción, sí que ha tenido que ingeniárselas para decir lo que piensa, y
ejercer oposición a un régimen totalmente autocrático, usando como
herramienta de difusión de sus
ideas el inter net, precisamente en uno de los países con menores índices de conectividad.
Es evidente que actualmente la omnipotencia del poder,
basada en el acceso privilegiado a la información, viene en franca decadencia, ante la difusión masiva de la información en el ciber espacio y la penetración de las redes sociales. Los regímenes dictatoriales (y la Cuba de los hermanos Castro lo
es) se ven especialmente amenazados por estos avances tecnológicos, que a todas luces confieren
parte de ese poder a personas del común, quienes han liderado en todo el mundo jornadas de
protesta y rebelión, y han
sido los protagonistas de las que se pueden denominar "las nuevas
revoluciones". Así que
no es extraño que el
estado cubano, al servicio del régimen, reprenda, restrinja o simplemente no estimule el
acceso a la inter net y a la tecnología móvil
celular.
Sorprende entonces que este haya sido el mecanismo usado
por Sánchez
para dar a conocer sus posturas y la enorme aceptación que ellas han tenido: cuenta con un gran número de seguidores y un reconocimiento que trasciende las
fronteras continentales.
Hablaré de Yoani, y las expectativas que tiene para que su país pueda salir del atraso, en el próximo artículo.
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