Tengo entendido que esta es la suma por la cual la Sociedad de
Mejoras Públicas, entidad sin ánimo de lucro, ha negociado con la Promotora
INFI Pereira los animales del zoológico.
Y no sólo eso, dueños del predio donde actualmente funciona el
parque, que quedará libre y con la mejor ubicación posible-anexo al aeropuerto
internacional Matecaña recién remodelado-,están “sentados
encima del tesoro” .
Seguramente han surgido muchas ideas para ambas cosas, inversión de
recursos y destinación del terreno. No obstante, las decisiones finales deberían
considerar no sólo los intereses de la Junta de la Sociedad de Mejoras sino, y
sobre todo, los de la ciudad.
Para alimentar la creatividad y con la mejor intención, voy a
atreverme a lanzar una idea.
Hace días ronda en mi cabeza el esquema de los parques públicos
que se vuelven detonadores de comercio, y, a la postre, los lugares más
costosos en sus respectivas ciudades.
Hablo del Parque de la 93 en Bogotá, o del Parque Lleras en Medellín.
Pues bien, si yo fuera promotor inmobiliario estaría buscando un
predio con vocación comercial apenas “insinuada”, para invertir en un proyecto
de renovación urbana. Y no me sentaría a
esperar a que un municipio deficitario me hiciera el urbanismo. Usando los instrumentos de gestión del suelo,
invertiría con recursos privados en toda una operación urbana, y compraría -con
la ayuda de la Alcaldía, para limitar la especulación- los predios aledaños
para desarrollaros comerciales y de parqueaderos. Una visión un poco más
ambiciosa incluiría asociarse con un constructor de viviendas, para desarrollar
en los alrededores un proyecto de ejecución
paulatina.
Si fuera la Sociedad de Mejoras estaría buscando ese promotor
inmobiliario como socio para invertir los 14 mil millones, o parte de ellos, en vez de “jugar” a serlo.Así, podría aportar
a la ciudad en la ejecución de un nuevo macroproyecto, y garantizar una
rentabilidad para seguir invirtiendo en su desarrollo.
Si fuera el Municipio estaría negociando el lote aledaño al
aeropuerto con la Sociedad de Mejoras, y mirando cómo este negocio y el proyecto
de renovación urbana, en algún sector de la ciudad,se pueden respaldar
mutuamente.
Un espacio público generoso en una zona de potencial renovación,
que detone todo un desarrollo inmobiliario,y la destinación del lote del actual
zoológico para proyectos con usos complementarios a la actividad aeroportuaria,
no son operaciones ajenas ni excluyentes.
Como dicen, ahí les dejo esa inquietud.
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